AMANTES DEL CAMPO

miércoles, 31 de octubre de 2012

SEMBRANDO CEBOLLINO


Para estas fechas todos los años ya tenía yo sembrado mi cebollino. Este año el 9 de septiembre eché semillas autóctonas de cebollas moradas y blancas, que eran las que tenía empeño en sembrar. Pero lo tallitos del cebollino no han alcanzado todavía el grosor suficiente como para pasarlos a tierra y habrá que esperar al mes que viene para poder sembrarlas. Este aspecto lo tendré que tener en cuenta para el año que viene y adelantaré los semilleros al mes de agosto, para que para octubre estén las plantas listas para sembrarlas.


Desde hace un par de unos años le estoy comprando a un agricultor de Motril las plantas de cebollino que él mismo cría de sus propias plantas. Al retrasarse mi cultivo del semillero, le he vuelto a comprar un par de manojos (de 80-90 plantas cada uno) porque me podía el ansia de tener la tierra esperando al cebollino. Son cebollas babosas, extraordinarias de sabor y que pueden alcanzar un calibre considerable.


Lo primero que hago con el cebollino es cortarle las puntas, cuando las raíces son muy largas también se las  corto un poco. Con ello provocamos el nacimiento de nuevos tallos y ayuda a que las plantas agarren sin problemas.


Luego las distribuyo en la tierra, las voy colocando de dos en dos en el lomo del surco y cuando están todas colocadas las comienzo a sembrar. Suelo dejar unos 10 cm de distancia entra planta y planta, lo suficiente para poder luego hacer las labores que precisen.

Si la tierra no tiene humedad es conveniente, después de sembrarlas, echarles un poquito de agua. Yo en este caso no las he regado porque ayer por la tarde cayeron 27 l/m2 y estaba la tierra chorreando.

Ya solamente hay que escardar y regar cuando lo precise. Para febrero empezaremos a consumir las primeras cebolletas.


Por cierto, llevamos un mes de noviembre estupendo, en cuanto a lluvias se refiere. Ya llevo contabilizados en el Cortijo 210'5 l/m2. Si sigue el año así volverán a llenarse los acuíferos y tendremos reservas para cuando no llueva.

Cambiando de tema, las patatas están estupendas ya se han emparejado todas y han cerrado los surcos con sus matas. las lluvias de los últimos días les han venido muy bien. En cuanto se aclare el tiempo las sulfateré con cobre para que aguanten las rociadas y la humedad que estamos teniendo.


Dando una vuelta por la finca he comprobado que todos los injertos de mangos que he hecho este año han agarrado; que los aguacates han recibido las lluvias como un regalo y se les nota que han engordado; por su parte, las papayas de la próxima campaña están enormes y las guayabas de limón comienzan a dar abundante fruto.





Algunas matas de haba ya superan la cuarta de altura, estas de la fotografía son de hace unos días; ya prácticamente han salido todos los golpes y se ven las filas alineadas. Pronto tendré que labrarlas.

domingo, 14 de octubre de 2012

SIEMBRA DE HABAS EN LLANO

Por Almuñécar, los meses de siembra natural de las habas son octubre y noviembre, aunque en  la vecina ciudad de Motril hay quien las siembra en verano y para las fechas que estamos ya se están comiendo las primeras de la temporada (o las últimas, según se mire). Aunque no es lo normal, las habas gustan más en primavera que en otoño, tardan más en hacerse y parece que el sabor de las habas en el mes de marzo es más intenso que las del mes de noviembre.

Hace unos días dudaba de sembrar ya las habas porque la tierra no tenía demasiado jugo y para que crezcan con fuerza considero que la tierra debe de tener más humedad de la que tenía. Finalmente, tras el paso de los últimos frentes de lluvias sin haber dejado una gota por nuestra tierra y viendo que las perspectivas de lluvia para las próximas semanas no son muy halagüeñas, me he decidido de sembrarlas hoy domingo (por eso del ansia y no esperar al mes que viene).

Normalmente suelo arar la tierra y surcarla, y sobre el lateral del surco echar las semillas de haba. Luego, cuando crecen, las suelo ir abrigando hasta que se quedan en medio del surco.

Pero este año, para evitar que la tierra pierda mucha humedad al surcarla, he decidido sembrarlas en plano. Aquí muchos vecinos así lo hacen; una vez arada la tierra, se echan de forma alternativa 2 o 3 semillas por golpe a unos 80 cm de distancia cada uno (en lugares más fríos suelen echar más semillas y las siembran a menor distancia). Yo así lo he hecho, y entre fila y fila he dejado aproximadamente 1 metro de distancia con la finalidad abrigarlas con la reja del rotavátor cuando estén con dos cuartas de altura. Previamente, la tarde anterior las eché en agua para acelerarles el brote.

Las he plantado en la segunda mitad del segundo bancal, en la más lejana al Cortijo. He sembrado dos variedades: mis semillas seleccionadas del año pasado de la variedad "Reina Mora" y otras, que no se que variedad son, que me mandó Gregorio de La Rioja, ésta últimas son más gordas y de un color marrón claro.

Solamente espero que en un par de semanas llueva un poquito y se puedan criar sin que pasen mucha sed.

Los mangos Osteen ya están alcanzando su maduración, algunos son ejemplares que superan el kilo. Finalmente no los he vendido ya que el precio rondaba los 70 céntimos y prefiero repartirlos entre la familia, amigos y vecinos.
En estos días he sembrado también brócolis de las semillas que me mandó el amigo Paco de la Huerta de los Robles. Reservaré un par de estas plantas para la selección de semillas.

Las patatas finalmente han nacido todas y ya se están emparejando, en cuanto al tamaño. Las estoy tratando semanalmente con cobre para evitar que las rociadas nocturnas les afecten.

Algunos cactus han florecido tras las lluvias.