Ayer sábado me puse manos a la obra y aré el bancal de los aguacates.En la época de la floración los aguacates pierden prácticamente toda la hoja y tras el manojo de flores echan los nuevos brotes. Toda esa hoja se va acumulando al pie de las plantas un año y otro y forma un mantillo muy nutriente producto de la descomposición de las mismas.
Las raíces superficiales de los aguacates suelen desarrollarse tras ese manto de hojas y en algunas ocasiones suelen desarrollar hongos (fitóftora), que debilitan la planta e incluso, como en el caso de los aguacates y otros árboles, la terminan secando. Estos hongos se desarrollan bajo tierra y utilizan siempre la humedad de la tierra para extenderse de una planta a otra.
Para evitar el desarrollo y proliferación de dicho hongo es conveniente airear la tierra y eliminar las posibles raíces enfermas. La planta no sufre y desarrolla nuevas raíces en poco tiempo, sin que le afecte a su desarrollo ni al fruto.Aproveché el arado de los aguacates para darles un abonado de fondo, le apliqué un complejo de materia orgánica con nitrógeno, potasa, fósforo y otros elementos.
Por otra parte, he sembrado en un semillero forestal calabazas de varios tipos, sandías y esponjas (lufa).También en el suelo, al principio del segundo bancal, he puesto 9 golpes de zapallitos de tronco. Suelo abrir un hoyo en el surco, lo relleno de mantillo y encima echo 3 semillas. Las vuelvo a cubrir con mantillo y las riego. Deben de estar húmedas hasta que nacen y luego solamente dejo la planta más fuerte, el resto las corto con las tijeras.
Ya que ha terminado el periodo de lluvias he limpiado también el gallinero. He recogido 3 sacos que los reservaré para echárselos a los mangos.






