ESCARDANDO LAS HABAS

Tras las lluvias de la semana pasada y los chaparrones de la presente han facilitado el nacimiento de las malas hierbas que era conveniente escardar.

El no utilizar herbicida en nuestra finca supone tener que escardar con frecuencia y, aunque parezca duro, si se hace con tiempo y de forma relajada, lo que supone es más una satisfacción que un tormento.

Pues manos a la obra, entre el miércoles y el jueves escardé todas las habas. Quedaron muy bien y algunas plantas miden ya casi dos cuartas.

Ante la previsión de lluvias para el sábado y domingo aproveché la mañana del sábado para levantar un poco de muro de la entrada. Madrugué y sin prisa, pero sin pausa, estuve hasta el mediodía colocando probetas. Tras este empujón pienso que en un día y poco más se terminará definitivamente.

También ayer por la tarde estuvo el tiempo bastante revuelto. Cayó un buen tormentón con truenos, rayos y viento. Hubo momentos en los que pensé que si duraba mucho rato la lluvia podría ocasionar más problemas que beneficios.

Al final las consecuencias que ha tenido la tormenta han sido positivas, salvo que ha tumbado de nuevo las patatas (no levantan cabeza) y también se han doblado algunas habas, pero no me preocupa demasiado porque se levantarán de nuevo en un par de días.

En total cayeron 55 l/m². Hoy domingo ha seguido lloviendo de forma suave, aunque por la tarde hemos tenido (y aún continúa) una nueva tormenta, con fuerte aparato eléctrico, pero más débil que la de ayer.