Este domingo, entre las elecciones municipal, los exámenes de los niños y que la tierra todavía estaba húmeda, no hemos hecho demasiadas cosas en el campo.
El muro del limonero ya está acabado, solamente queda adecentar un poco el espacio y echar una capa de hormigón entre el porche y los cipreses.
Los pinos los he recortado y he dejado que siga recto el ciprés.
Con el tiempo la araucaria que está detrás sobresaldrá por encima de los pinos.
Para llevar un control del gallinero, he decidido anillar las gallinas; bueno, les he colocado unas bridas en las patas. Sin duda es un método igual de efectivo, pero más barato.
En este caso solamente he anillado las que han nacido en el 2011, que, como digo, les he colocado una brida blanca en la pata derecha. Próximamente nacerán otros pollitos, que en su momento les colocaré la brida blanca en las patas izquierdas. De esta manera sabré que las gallinas que tengan la brida blanca nacieron en el 2011 y comenzarán a poner en el 2012.
Las parras del año pasado tienen ya unos sarmientos muy largos, esperemos que el año que viene empiecen a dar uvas.
Por su parte, las papayas de esta temporada se están terminando al tiempo que las plantas están echando flores nuevas. La que vemos en la imagen pesará más de 2 kg.
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